miércoles, 23 de marzo de 2011

¡Cuando se cree que las cosas van bien!

Cuando se piensa que las cosas van bien por el hecho de que se están alcanzado los resultados semana a semana, da uno por supuesto que todo marcha viento en popa, pero que gran sorpresa nos da la vida al preguntar cómo se encuentra tu equipo de trabajo, en mi caso los estudiantes que forman parte del semanario de la Universidad, cuando nos encontramos por arrancar el periódico número 9 del semestre más un suplemento especial para la vivencia vocacional, observamos comentarios divididos, desde los que enfatizan que vamos bien y hasta los que hablan de que el periódico les absorbe mucho tiempo y que no les sobra el tiempo para tener otros amigos, hasta comentarios de si les gusta o no el periódico y que cambiarían si estuviera en sus manos esa oportunidad.
Para dar paso a la opinión de los alumnos, busqué basarme en el poder de la vulnerabilidad, escucharlos y tomar en cuenta sus sugerencias con el afán de buscar respuestas que nos ayuden a todos a crecer como personas y a tratar de mejorar nuestros canales de comunicación para hacer más eficientes nuestros procesos de trabajo en la elaboración de cada periódico.
Otro aspecto importante, es escuchar las inquietudes de los alumnos que ocupan cargos importantes en el organigrama del periódico y de los estudiantes que sacan la chamba de manera coordinada con sus demás compañeros de trabajo.
Pude observar que hay que trabajar más en el fomento de la confianza para que ellos (los alumnos) den paso a la apertura, para que hablen sin temor alguno, sin incomodar a otras personas, pero sobre todo, que se hagan escuchar y que sus aportaciones contribuyan a una mejor relación de trabajo.
Entre algunas de las preguntas que les plantee durante la videograbación fueron las siguientes:

¿Que te parerece el periódico?
¿Cómo te sientes trabajando en el periódico?
Cómo ves el ambiente de trabajo?
¿Si estuviera en tus manos la responsabilidad que le cambiarías?
¿Qué no te gusta del periódico?
¿Qué recomendarías?

Qué importante es para uno que tiene que trabajar con diferentes equipos de trabajo, conocer las inquietudes de cada persona, así como lo que le agrada y desagrada de su fuente de trabajo y a la vez observar que tan volatil es el carácter de las personas al momento de ser cuestionadas y que tanto, están dispuestas a abrirse para darse a conocer, de decirnos cómo se sienten y si hay empatía con el resto de los demás integrantes del equipo.

En lo personal, nos podemos dar cuenta que es muy complejo conocer al ser huamno como tal en nuestras áreas de trabajo. Como ejemplo, lo podemos ver en una relación de pareja, cuántas circusntancias se presentan diariamente y que nos provocan ansiedad, estrés y muchas veces temor, por no tener las respuestas apropiadas para con la otra persona o para con los hijos.

Es una excelente oportunidad, dar paso a la vulnerabilidad de cada uno para poner el corazón en la mesa y hablar de lo que nos pasa, lo que queremos y quienes somos para sentirnos mejor y hacer sentir mejor a los demás.




 



2 comentarios:

  1. Juan, me parece muy interesante lo que planteas, y pienso que definitivamente se necesita de confianza en el otro para que se pueda dar una apertura y diálogo y de esta forma conocer las expectativas de tu grupo de trabajo y ellos conozcan las tuyas

    ResponderEliminar
  2. Gracias Juan, me gustaría que comentáramos más sobre este caso y algunas otras preguntas. Y, claro, lo que te motivó a explorar el tema con los integrantes.

    ResponderEliminar