miércoles, 16 de marzo de 2011

Comentarios Capítulos 17, 18, parte 4 y capítulos 21 y 24

Capítulo 17
Hablar es caminar. Lenguaje y coraje en acción.
“Antes de hablar es de vital importancia conectar la lengua al cerebro”.
Cuántas veces en nuestros centros de trabajo observamos cómo se desgasta la gente en “infiernitos”, al estar comentando algún asunto de la organización que aún no está claro o que tiene que ver con la manera de operar o funcionar en el área de trabajo de las personas implicadas.
No debemos pasar por alto, que nuestra conciencia nos señala lo que está bien y lo que está mal, es una lucecita preventiva que trata de allanarnos el camino y busca orientarnos para intentar hacer lo mejor posible las cosas.
Como podemos apreciar, en cada uno de los capítulos que hemos leído, nos hacen hincapié de manera directa e indirecta al tema de la persona y su autenticidad. Considero que cuando se da la autenticidad en la persona, cuando se acepta tal cual es se da paso a la vulnerabilidad y por ende se es lo más honesto y abierto posible ante los demás, lo cual representa una gran oportunidad para disminuir la ansiedad de ciertos temores que en determinado momento no queremos que los demás conozcan.   
Podemos también observar cómo sale a relucir el orgullo, el carácter y la inquietud, cuando de actúa de manera inteligente para enfrentar la ansiedad que se nos presenta cuando estamos preocupados por ofrecer una respuesta oportuna y satisfactoria para los demás.
Ante los retos que exigen el trabajar para una organización, es importante enfrentarlos con tenacidad, coraje y compromiso, con lo cual marcamos cierto liderazgo en nuestras áreas de trabajo.
De igual forma, hay que pasar de las palabras a los hechos y no ser sólo meros espectadores de lo que sucede en nuestro entorno.
La riqueza de los contenidos del discurso que se pronuncie puede fortalecer las estrategias, procesos y productividad de las personas al motivarlas y decirles por dónde debe seguir adelante en todo lo que emprendan.
Como dices George, cuando se presenta la ansiedad en las personas, se da paso a la vitalidad, lo cual desencadena en la acción, en observar qué está pasando y cómo nos podemos mover para reaccionar de manera positiva.
También como lo señala Peter Koestenbaum,  en el artículo “hablar es caminar. Lenguaje y coraje en acción”, mediante la promoción de conversaciones inteligentes de liderazgo acerca de la ansiedad, incluimos representaciones simbólicas y fantasías guiadas.
Y si utilizamos efectivamente la ansiedad en nuestro beneficio personal, se convierte en un crecimiento significativo. Además de que la ansiedad bien gestionada es la clave para la seguridad y la fuerza interior. En el caso contrario, una ansiedad mal enfocada puede orillarnos al abuso de sustancias, a estilos de vida obsesivo-compulsivos y se corre el riesgo de sentirse solo, aislado y sin rumbo.
Un gran apoyo para nosotros representa el sentirnos acompañados por un guía, un mentor, un entrenador o terapeuta, para enfrentar los problemas, muchas veces lo podemos encontrar en los consejos de los padres, de los amigos, de dónde tomamos lo que nos hace “click”, para tomar la mejor decisión.
No debemos pasar por alto, que nuestra conciencia nos señala lo que está bien y lo que está mal, es una lucecita preventiva que trata de allanarnos el camino.
Capítulo 18
¡Cómo es vivir y trabajar aquí?
¿Hasta qué grado se involucra la gente por iniciativa propia más que por la plata que va a recibir por sus servicios o trabajo?
La actitud y disposición de las personas son importantes para el éxito de una organización, cada persona es un mundo y por lo tanto, hay que establecer objetivos a fines que les inviten a sumarse a las metas que se buscan alcanzar de una manera voluntaria y sin prejuicios, hay que decirles lo valiosos que son para los propósitos de la empresa y agradecerles por su compromiso y dedicación.
Sí realmente se quiere trabajar en equipo, es importante que la gente se conozca bien, que haya empatía, que intercambien logros y desaventuras personales que les permitan crecer como personas, pero sobre todo, que exista confianza, para que juntos puedan enfrentar los retos que demanda la organización o grupos al cual pertenezcan, además de que deben de dejar de lado los problemas, envidias y prejuicios y ayudarse de manera mutua para alcanzar los objetivos.
Cuando hay confianza para hablar con libertad de cómo se está trabajando y las cosas no van bien o falta mucho por hacer para mejorar, la gente experimenta un estado de paz y se quita un peso de encima de ansiedad, es decir, la minimiza.
Uno como trabajador debe poner su parte y estar dispuesto a “pagar el precio” para poder formar parte de un equipo que esté comprometido y puedan lograrse las metas que se hayan trazado en conjunto.
Podemos observar que a través del diálogo y conocimiento de los comentarios que externan las personas, se obtiene información valiosa que puede ayudar al rendimiento de las personas de manera óptima, pero ¿cuántas veces sucede en nuestras áreas trabajo, cuando la comunicación no es asertiva?, muy rara vez.
La unidad de las personas en el trabajo, le dan sentido a la organización, por lo que es importante que la gente conozca cuál es su chamba y su papel dentro de la empresa.
Notros como empleados y que nos encontramos en el “terreno de juego” de la organización, podemos aportar información valiosa que pueda enriquecer el plan de trabajo de la empresa y mejorar las condiciones de todos y a través de la indagación apreciativa podemos conocer cómo realmente nos sentimos y nos encontramos en nuestros puestos de trabajo.
Parte 4
Las emociones y el personal
Equilibrio de competencias.
¿Qué tan honestos somos en decir la verdad en nuestras áreas de trabajo al hablar con un superior?
Para que las cosas sucedan, depende de cada uno ponerlas en marcha. Y en esencia como dicen los autores de la parte 4, el cambio depende de la voluntad de actuar con valentía, y aceptar abiertamente a ser vulnerables y sobre todo anteponerse a estar bajo el dominio de la tecnología y hacer a un lado las bondades que ofrece el conocimiento y los valores fundamentados.
No debemos pasar por alto que la tecnología debe estar a nuestro servicio y no nosotros al servicio de ella. La organización de aprendizaje depende de la creatividad y adaptabilidad para el cambio por parte de la persona, lo paradójico es que para la persona el cambio significa llegar a ser más de lo que ya somos.
Pienso que es importante comenzar por respetarse a uno mismo, respetar en primera instancia nuestro templo que es nuestra persona (cuerpo y alma) para tratar de entendernos y entender el entorno para poder moverse en equilibrio con los demás y establecer redes de colaboración que nos permitan crecer como personas.
Capítulo 21
En la tierra de los tontos
La gente en las organizaciones no puede pasar indiferente, ni ser indiferente ante los problemas y angustias de los demás. De igual forma, no puede trabajar de manera óptima si se encuentra rodeada por temores y miedos infundados que no le permitan ver más allá de sus posibilidades y saberse que en sus manos tiene la oportunidad de cambiar y modificar los procesos de trabajo dentro de la empresa, puede echar mano de sus talentos y habilidades que puede también, poner al servicio de los demás. Y sobre todo, que tenga la confianza de que se pueden realizar las obras que trasciendan en la vida personal y profesional de cada individuo.
Capítulo 24
Sneaking the spirit In
John Schuster
El espíritu oculto
¿Cómo influyen nuestras creencias en nuestra propia vida y en lo laboral?
Como consultores debemos separar las modas de las tendencias.
La tecnología y los procesos no pueden estar por encima del conocimiento y actitud de las personas. Para realizar una consultoría de calidad, primero se debe trabajar con las personas, para luego tratar de modificar sus conductas de trabajo e interrelación dentro de las organizaciones, y esto se puede lograr si se enseña a las personas a conocerse mejor a sí misma para luego ayudar a las demás con las que interactúan.
Considero que es importante observar cuál es el backgraound que traen las personas cuando se insertan a las organizaciones y cómo se pueden utilizar esos conocimientos y habilidades para aplicarlos en las interrelaciones que establecen con las personas en sus respectivas áreas de trabajo.
El que nos quedemos como solo espectadores, depende de nosotros, de cómo procesemos nuestro cerebro y nuestra conciencia, sólo nosotros podemos lograr la trascendencia en la medida que seamos auténticos y vulnerables para con los demás. No podemos estar trabajando en las organizaciones de manera robotizada, tenemos que poner en práctica nuestros talentos y conocimientos para operar la tecnología y procesos de colaboración con las demás personas.
Por último, considero que el trabajo en equipo, ejecutado de manera colaborativa, nos permitirá en primera instancia mejorar como personas, toda vez que habrá un mayor acercamiento con mis compañeros de trabajo para sacar la chamba y ser más empáticos.

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